La radiofrecuencia con microagujas revitaliza la piel a través de dos acciones combinadas. Por un lado, microagujas crean un daño mecánico, y por otro, el calor penetra a profundidad, provocando un daño térmico. Estos efectos estimulan la producción de colágeno de manera intensa y profunda.
**Ventajas de la radiofrecuencia con microagujas**
Este tratamiento es versátil, ya que actúa tanto en el rostro como en el cuerpo. Mejora la flacidez, suaviza cicatrices, atenúa estrías y remodela el óvalo facial, brindando un aspecto más firme y rejuvenecido.
**Apto para todos los tonos de piel**
La radiofrecuencia con microagujas es segura para cualquier fototipo, desde pieles claras hasta las más oscuras.
**Aplicable en cualquier época del año**
Puedes realizar este tratamiento en cualquier temporada, sin preocuparte por los efectos del sol.
**Sin necesidad de baja laboral**
Este procedimiento no requiere interrupción en tus actividades diarias.
**¿A quién se lo recomendamos?**
Aunque cada tratamiento debe ser indicado por un especialista, la radiofrecuencia con microagujas es ideal para quienes presentan flacidez facial o corporal. Es muy recomendada para mujeres que, tras el parto, buscan mejorar la laxitud abdominal o quienes desean tratar cicatrices de acné, cesáreas o cualquier otra lesión.
**Resultados visibles y duraderos**
Los resultados comienzan a notarse a partir de la segunda sesión. Aunque se aconsejan entre 3 y 5 sesiones para un resultado óptimo, la piel seguirá mejorando hasta 12 meses después del tratamiento.
