
Mitos y dudas comunes sobre los condones masculinos
“No me cabe”: mitos y dudas comunes sobre los condones masculinos
Los conservantes de látex se adaptan a cualquier anatomía y tienen una larga durabilidad. Existen diferentes tamaños para todos los casos.
Las infecciones de transmisión sexual (ITS) están aumentando entre los jóvenes en España. Esto ha generado más preocupación, ya que el Ministerio de Sanidad, dirigido por Mónica García, ofrece condones masculinos gratis para este grupo.
A pesar de centrarse en este método anticonceptivo, el condón masculino es una opción eficaz. No solo previene embarazos, sino que también frena la transmisión de ITS.
Es crucial usar los preservativos correctamente para maximizar su eficacia y eliminar viejos mitos. La prevalencia de ITS sigue siendo una preocupación creciente.
Entre las excusas comunes para no usar condón está «no me cabe» o «me aprieta demasiado». Esta idea es infundada y se ha desmentido en redes sociales, mostrando que los condones se adaptan a la mayoría de tamaños.
En Europa, los preservativos tienen un tamaño nominal de 54 a 56 mm. Gracias a la flexibilidad del látex, se ajustan a la mayoría de penes.
Si aún hay preocupación, existen diferentes tamaños disponibles. La Clínica Cleveland explica que hay opciones tanto pequeñas como grandes, adaptadas a cualquier anatomía.
Los condones pueden caducar, por lo que es vital revisar la fecha de vencimiento. El látex se degrada con el tiempo, aumentando el riesgo de roturas.
El uso correcto de preservativos ofrece buena protección contra el herpes y el VPH. Estos virus pueden transmitirse incluso sin síntomas visibles.
Para el sexo oral, existen barreras de látex específicas. Si no están disponibles, se puede cortar un condón masculino para usarlos.
El VPH, en particular, puede complicarse en algunos casos, llegando a formas de cáncer. Por eso, la protección es fundamental.
Utilizar más de un condón a la vez no aumenta la protección, sino que la reduce por la fricción. Es preferible usar un solo condón masculino o uno femenino.
La mayoría de los preservativos en España están hechos de látex, pero existen opciones de otros materiales. Aquellos con alergias al látex pueden optar por condones de poliuretano o piel de cordero.
No todos los lubricantes son seguros con todos los condones. Los lubricantes a base de aceite pueden debilitar el látex, pero son adecuados para otros materiales como el poliuretano.
Guardar condones en la cartera durante mucho tiempo puede dañarlos. El calor y la fricción afectan la seguridad del preservativo.